Exiliados
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No todos los caminos comienzan con gloria. Algunos nacen en el silencio del rechazo, en la sombra de lo inesperado. Así surgió Exiliados: de las ruinas de una antigua cantera, donde un grupo de jugadores encontró el fin de una etapa… y el inicio de su verdadera historia.
No fue una ruptura ruidosa, fue un desprendimiento necesario. Por desacuerdos o por decisiones ajenas, nos vimos fuera. Pero lejos de caer, decidimos levantarnos. Como los ronin, los guerreros sin señor, encontramos fuerza en la libertad y forjamos nuestro propio destino.
El nombre no fue casualidad. Exiliados refleja lo que fuimos… y lo que elegimos ser. Hoy, caminamos sin ataduras, pero no solos. Somos un grupo unido por la experiencia, por el aprendizaje, por la voluntad de seguir jugando, creciendo y compitiendo desde otro lugar. Uno que construimos por nosotros y para nosotros.
El logo que nos representa lleva el espíritu del ronin: un símbolo de dignidad, resistencia y evolución. No estamos en guerra con nadie, pero tampoco seguimos las reglas de otros. Elegimos escribir nuestra propia historia. Y eso, para nosotros, es motivo de orgullo.
Y hoy, al cumplir dos años desde nuestra creación, este mensaje cobra un nuevo valor. No es solo una presentación: es un homenaje al camino recorrido. Dos años de desafíos, de victorias, de aprendizajes y sobre todo, de comunidad. Gracias a cada integrante que fue parte del viaje y a quienes aún siguen escribiendo esta historia con nosotros.
Este espacio marca el inicio oficial de nuestro nuevo capítulo. Acá compartiremos nuestras novedades, nuestras ligas, resultados y objetivos. Pero también nuestras ideas, pensamientos y, sobre todo, el compañerismo que nos trajo hasta acá.
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Nuestros compañeros
No somos un grupo más. Somos Exiliados.
Cada miembro que lleva este nombre es parte de algo construido con esfuerzo, respeto y unión.
No importa de dónde venimos, lo que nos define es hacia dónde vamos. Y lo hacemos juntos.
